En ese sentido Raúl Durdos, líder del sindicato de Obreros Maritimos Unidos SOMU expresó su preocupación en un escrito dirigido al CFP, subrayando que esta inactividad es resultado de una estrategia reconocida como "lockout". El SOMU sostiene que las empresas están utilizando esta táctica para presionar a los trabajadores a aceptar reducciones salariales en el marco del convenio colectivo. A pesar de la falta de actividad, Durdos aclaró que no se han realizado medidas de fuerza que obstruyan la salida de los buques, insistiendo que los trabajadores están listos para operar desde el inicio de la temporada. Solo unos pocos barcos, como el Mar Sur, han continuado operando, dejando al resto de la flota inutilizada. Cabe señalar que el SOMU ha estado participando en negociaciones convocadas por la Secretaría de Trabajo, pero no ha logrado avances significativos, ya que las empresas buscan reducir costos a expensas de los salarios de los trabajadores. Además, el sindicato ha solicitado al CFP medidas fiscales, como la suspensión del Derecho Único de Extracción (DUE), para aliviar las presiones económicas del sector. La situación es grave para los trabajadores del mar, con más de cuatro meses de temporada y escaso movimiento de buques. El SOMU enfatizó que no obstaculizará la actividad pesquera, crucial para la economía nacional, que genera ingresos anuales que superan los dos mil millones de dólares. La organización reafirma su compromiso de buscar soluciones para reactivar la flota y asegurar condiciones laborales dignas para sus afiliados.